
«Ley europea de la Equidad Digital»: hacia prácticas comerciales justas en el entorno online
La Comisión Europea abrió el pasado 17 de julio de 2025 la consulta pública sobre el próximo Digital Fairness Act, una propuesta destinada a identificar y corregir vacíos legales relativos a prácticas comerciales desleales en línea, con especial atención a los usuarios más vulnerables, como los menores . Esta iniciativa responde a los resultados del informe de Digital Fairness Fitness Check de octubre de 2024, que constató que la actual legislación sobre consumidores (Directiva de Prácticas Comerciales, Derechos de los Consumidores y Condiciones Contractuales) sigue siendo relevante, pero no se adapta con eficacia al entorno digital . El texto del horizonte contempla la prohibición de “patrones oscuros” (dark patterns) en interfaces digitales, las estructuras de diseño adictivas —como las gamificaciones o algoritmos manipuladores que inducen comportamientos perjudiciales—, y prácticas de marketing de influencers que carecen de transparencia para el consumidor . Además, la futura ley regulará la personalización de precios o contenidos en función del perfil del usuario, así como las dificultades artificiales creadas para cancelar suscripciones, imponiendo la misma facilidad tanto para suscribirse como para darse de baja (). Desde una perspectiva institucional, la propuesta gira en torno a conceptos de “fairness by design” y “default”, que exigirán a empresas del entorno digital —plataformas, desarrolladores de aplicaciones, proveedores de servicios en línea y sitios de comercio electrónico— cumplir con principios de equidad en la experiencia del usuario. Asimismo, se espera que la legislación complemente marcos existentes como la Digital Services Act, con la que guarda sinergia, pero también posee una vocación más específica y vinculante . El calendario legislativo previsto señala que la consulta pública permanecerá abierta hasta el 9 de octubre de 2025, siendo la propuesta legislativa sometida a la Comisión para su aprobación hacia mediados de 2026 (). El comisario Michael McGrath ha subrayado que esta norma será tanto “pro‑consumidor como pro‑empresa”, aportando claridad jurídica y fortaleciendo la confianza digital sin frenar la innovación . Desde una óptica académica, el Digital Fairness Act incluye varias manifestaciones doctrinales relevantes: En resumen, la futura ley pretende convertirse en una pieza normativa estratégica dentro del “paquete digital” europeo, acompañando y perfeccionando instrumentos como la DSA y la DMA. Sus objetivos son claros: promover un entorno digital justo, impedir prácticas comerciales abusivas y ampliar el escudo legal del usuario frente a tecnologías que explotan sus sesgos cognitivos o circunstancias personales.