Un empresario del sector de la hostelería ha sido exonerado de una deuda de 180.866 euros gracias a la aplicación de la Ley de la Segunda Oportunidad. El Juzgado de lo Mercantil número 5 de Barcelona aprobó un plan de pagos de cinco años, permitiéndole reorganizar su economía sin perder su vivienda .
Este empresario había acumulado la deuda tras no poder devolver los préstamos que le concedieron para poner en marcha su negocio de bar, el cual tuvo que cerrar debido a la pandemia de COVID-19. La abogada Marta Bergadà, socia fundadora de Bergadà Abogados, destacó que el empresario cumplía con los requisitos de ser un deudor de buena fe, condición indispensable para acogerse a la Ley de la Segunda Oportunidad.
El caso subraya la importancia de contar con un marco legal que permita a los deudores honestos liberarse de cargas económicas que les impiden avanzar. La Ley de la Segunda Oportunidad sigue demostrando ser una herramienta fundamental para aquellos que, debido a circunstancias ajenas a su voluntad, se ven en una situación de insolvencia